Tener un automóvil también conlleva responsabilidades para el conductor, como no conducir a exceso de velocidad, respetar los señalamientos y cumplir con las normas de seguridad. Desafortunadamente, hay un alto índice de accidentes ocasionados por conductores en estado de ebriedad y seguramente tú conoces a alguien que pasó por una situación como esta.
Pero cuando se tiene un accidente de esta magnitud, no solo se debe enfrentar la situación al instante, también hay que pagar algunas de sus consecuencias. En Estados Unidos hay una diferencia entre conducir intoxicado (DWI) y conducir bajo la influencia de sustancias (DUI). El primero señala que el conductor está bajo un alto nivel tóxico de sustancias y el segundo cuando se trata de una cantidad moderada de intoxicación.
Por lo tanto, cada uno se considera un delito y es castigado de distinta forma. Pero todo depende del condado en el que te encuentres. Algunas ciudades cuentan con políticas de cero tolerancia frente a cualquier porcentaje de alcohol que se encuentre en la sangre del conductor.
Cuando el conductor cuenta con un seguro de auto, entonces podría estar respaldado tras el accidente. Sin embargo, después de este su seguro de auto tendrá algunas modificaciones como:
Después de un accidente DUI es importante que presentes la forma FR.19, FR44 o SR-22 según sea tu caso. Esto con la finalidad de demostrar que cuentas con un seguro de auto o de lo contrario no se te permitirá conducir nuevamente. Solicita estas formas a tu agencia de seguros, deberás tener a la mano tu póliza de seguro de auto.
Es posible que después de un accidente de este tipo las agencias te nieguen el servicio a cubrirte mientras que otras lo aprovecharán para elevar sus costos. Por esto es necesario que realices una comparación sobre sus servicios y tarifas antes de seleccionar el seguro de auto. Esto te permite conseguir la mejor tasa del mercado tras haber sufrido un DUI o DWI.